El mundo está cambiando. Una pandemia mundial no deja indiferente a ningún sector. Desde los más tradicionales, pasando por la industria, hasta los más tecnológicos basados en blockchain.
La industria musical no iba a ser menos. La transformación interna y externa de la industria musical y de sus integrantes (cantantes, productores, A&R’s, managers etc…) ha evolucionado y se ha adaptado a las exigencias del mercado. Pero, cuando éste mercado se encuentra en una revolución total, son las cualidades de un manager musical, las que realmente deben evolucionar.
El tipo de manager que hoy necesita cualquier propuesta musical independiente, va ligado a las nuevas necesidades y exigencias de unos artistas y un mercado altamente volátil. Esta volatilidad manejada de la forma correcta se puede convertir en más oportunidades para nuevos artistas y proyectos musicales.
Veámos pues las 5 cualidades que debe tener un e-manager musical.
1. Dominar herramientas digitales que aumenten la visibilidad del artista (funnel de venta, facebook ads, etc…)
La viralidad es algo más asequible de lo que parece si quien te representa domina técnicas de crecimiento de visibilidad en las redes sociales. Los ecommerce y dropshipings saben perfectamente como hacer que su producto llegue a los posibles compradores con las características necesarias. Entonces, ¿porqué un artista (producto) no debería ser descubierto por un público que realmente esté interesado en su tipo de propuesta musical?
El mismo Administrador de Anuncios de Facebook (Business Manager) o Youtube (AdSense), es quién tiene la clave del impacto musical en los oídos de los consumidores adecuados.
2. Generar nuevos tipos de ingresos (más allá industria tradicional
Existe vida después de la industria tradicional. Pero un manager tradicional no sabe ver más allá de conciertos, merchandising y marcas patrocionadoras básicas.
Hoy en día existen nuevas fórmulas para generar ingresos, basadas en las emociones del proyecto musical, que acaban generando conexiones verdaderas con los fans.
Siguiendo la misma línea del punto:
1. Las fórmulas que generarn nuevos ingresos deben ir implantadas a través de embudos de venta y escalables dentro de la red, que ofrezcan siempre aquello que el público está dispuesto a escuhar con más probabilidad.
Usar los nuevos canales de comunicación para vender personalmente a través de Whatsapp, Telegram, impactar por primera vez a través de TikTok o Reels; compartir conocimientos a través de un Showinar o en el mismo escenario (físico o virtual), pero sabiendo emplear estrategias avanzadas para cada plataforma.
3. Implementar nuevas acciones que generen nuevas experiencias
Fusionar la música del artista con diferentes atractivos, con tal de atraer al público a un proyecto musical realmente diferente (o almenos perceptiblemente distinto).
Los festivales son claros ejemplos de experiencias y NO productos concretos; ya que el público acude por la experiencia global del evento, la marca o el conjunto del cartel (estilo y experiencia distintiva del festival), no por un grupo o artista en concreto. Prueba irrefutable de ello es la venta masiva de entradas y abonos antes de anunciar qué artistas van a formar parte del line-up.
4. Proponer ideas que impacten a la comunidad del artista
En un mundo cambiante, la capacidad de reinventarse de manera constante hace que el éxito sea algo habitual en los diferentes proyectos desarrollados.
Las buenas iniciativas de cada proyecto suman valor al producto final, y a las futuras percepciones de cualquier movimiento que haga el artista con su carrera musical.
El crecimiento e impacto de la carrera irá claramente influenciado y relacionado con los contenidos, acciones y propuestas diferentes que salgan del artista.
El e-manager debe entender que el público tiene una enorme cantidad de contenido musical consumible de forma gratuita con un solo click. Debemos trabajar entonces en la capacidad para sorprender (manteniendo la esencia) para ser el producto mejor posicionado y más brillante dentro del escaparate musical.
5. Asociarse con el artista de tal manera que gastos y beneficios se comparten en el mismo porcentaje
Éste es el punto más polemico, ya que el nuevo cambio de paradigma de la industria musical hace que algunos dinosaurios que llevan décadas ensanchando las cuentas de las grandes discográficas, se echen las manos a la cabeza.
Hay que entender a un manager y su artista como si fueran 2 socios de una misma empresa. ¿Verdad que siempre se aporta un capital inicial y se reparten los beneficios según la aportación de cada socio? Pues ese 50/50 cuando se crea una empresa tambien aplica a los gastos.
Ésta es la única forma de incentivo e involucración REAL para que el eManager y el artista sean los mayores beneficiarios y responsables del éxito y fracaso del proyecto.
Por otra parte, se desincentiva al artista a llevar una vida basada en el despilfarro, los malos hábitos y conductas que pueden acabar llevando su empresa (su vida y producto) a la ruina 50% del manager tradicional y un 50% de conocimiento en marketing estratégico musical (en la red).
Conseguimos pues, dos puntos importantes estudiados a nivel empresarial: la visibilidad y viabilidad del proyecto. Nadie se subiría a remar a un barco que no tiene mínimas garantías de llegar a buen puerto.
Así pues, todo pasa por acabar desarrollando una comunidad fiel, un discurso y un proyecto con alma y dirección. El cual si ya está generando ingresos a dia de hoy, las posibilidades éxito y mejora aplicando éstos 5 puntos aumentan de forma notable. Al fin y al cabo, todo va a seguir pasando por hacer canciones.